Antes de que el gobierno de Fidel Castro eliminó la libertad e independencia de la prensa a principios del verano de 1960, la revista Bohemia tenía una gran tirada entre los suscriptores de toda la isla y de grandes franjas de América Latina. Debido a que sus editores habían aprovechado todas las oportunidades para impugnar la dictadura de Batista en la década de 1950 y documentaron una enorme cantidad de «noticias» que los censores no publicaban, las tres primeras ediciones de Bohemia de 1959, impresas en el punto álgido del apoyo público a la Revolución, vendieron más de un millón de ejemplares cada una. Las «Ediciones Libertad» también proporcionaban información extraordinariamente detallada sobre los acontecimientos y las luchas de los activistas revolucionarios para combatir la dictadura que hasta entonces era desconocida para gran parte del público cubano. Tan en serio se tomaron los cubanos estas revelaciones que muchos, como Héctor Sotolongo, mandaron a encuadernar profesionalmente sus ejemplares de la revista. Héctor tituló su volumen «Historia de la Revolución Cubana, 1952-1959”. Colección personal de Lillian Guerra.
