University of Florida Homepage

Cooperativa cubano-china de thermidor de langosta del Caribe, 2014

La ley comunista convirtió en estrictamente ilegales la pesca, la venta y el consumo de langostas fuera de las embarcaciones y los locales propiedad del gobierno a principios de la década de 1960. Desde la década de 1970 hasta prácticamente hoy, Cuba importa pescado (normalmente merluza juvenil de un tipo que normalmente se utiliza para el pescado de cebo o pescadilla en cualquier otro país) en lugar de permitir la libre pesca, venta y consumo de la mayoría de las especies de peces en aguas cubanas. Al igual que la langosta caribeña, los peces típicos de las aguas costeras, como el pargo rojo, la platija y otros similares, se destinan exclusivamente a la exportación, con el fin de obtener ingresos públicos. Sin embargo, uno de los barómetros de la ruptura del miedo de los ciudadanos al Estado y del desafío a sus mandatos supuestamente ideológicos fue la venta abierta de langosta en muchos paladares como éste en los años de Obama. A diferencia de las pesquerías de Maine, las langostas de Cuba están infraexplotadas. Las langostas de Cuba tienen un sabor fuerte y delicioso porque no son «bebés» de menos de 14 años como en los mercados de EE.UU., sino de entre 30 y 36 años, pescadas en el pico de su madurez sexual y que suelen pesar entre 6 y 9 libras.