El exitoso reportaje de Herbert Matthews en febrero de 1957 en el New York Times sobre la supervivencia de Fidel Castro y 18 miembros de una fuerza de invasión de 82 hombres inspiró al joven periodista Andrew St. George. Con la financiación de la revista Coronet y el pesado equipo de grabación de la CBS, St. George se puso en contacto con activistas clandestinos del Movimiento 26 de Julio de Fidel en Nueva York y Miami para reservar el viaje. Una vez en Oriente, Celia Sánchez, una de las principales organizadoras locales, le proporcionó un piso franco y un pase de prensa. Felipe Guerra Matos hizo de guía. A diferencia de Matthews, que pasó menos de un día con la tropa de Fidel, St. George pasó casi dos meses, desde mediados de abril hasta principios de junio de 1957. Fue el primero de los seis viajes que hizo a la Sierra. St. George pasó más tiempo con el Ejército Rebelde que cualquier otro periodista. Fotografía de Ernesto “Che” Guevara con la cámara de St. George.