Quizás la imagen más común del Periodo Especial fue la de los cubanos de pie o sentados durante horas junto a las calles y carreteras de la ciudad, esperando a que alguien les llevara. A la mayoría le importaban poco las condiciones. A menudo se conformaban con sentarse en el regazo de un desconocido o, como en este caso, apretujarse en la pequeña cabina de un camión del gobierno que transportaba caballos de carga. Oeste de Cuba, enero de 1999.