En 1912, Emilio Bacardí Moreau, hijo del fundador de la Compañía de Ron Bacardí, emprendió una expedición personal a Europa y Oriente Medio para la compra de numerosas antigüedades, en particular una auténtica momia egipcia (y su sarcófago original) que él y su esposa, Elvira Cape, esperaban exponer en el recién fundado museo histórico de Santiago de Cuba. La visión de Bacardí de preservar los tesoros nacionales de Cuba a través del precio de la entrada para ver la momia tuvo éxito, quizás más de lo que él esperaba, aunque los controles climáticos y los recursos necesarios para la conservación contemporánea en los últimos años han claramente disminuido, a pesar del compromiso de conservadores locales. Santiago de Cuba, 2016
Auténtica momia egipcia
Sarcófago original